Fiebre de cruza de razas orientales
01 Por Jean Marie Vangansberg desde Bélgica para la revista Argentina "Tradición"
Cuando presenté unos cuantos Orientales (Shamo cruzado con el gallo Francés y Asil de la India del Norte cruzado con el gallo Francés) hace diez años en los reñideros a través del gallero Vietnamita, el señor Jean-Louis Bui-van, quien estaba interesado en hacerlos luchar y criarlos, la mayoría de los galleros no tenían confianza en tales aves, criticando la velocidad y su aspecto particular. br En aquella época yo estaba involucrado en el estudio de diferentes razas, la Malayoide pura ó la Bankivoide pura y tenía problemas de espacio y tiempo para mantener aves cruzadas crecidas para los reñideros.
Probé muchos cruzamientos para observar los resultados y experimentar con ellos en los reñideros, pero la mayoría de mis amigos galleros en el Oeste de Bélgica y en Francia no estaban interesados en introducirlos en las competencias de Francia del Norte.
Sin embargo, Florian Delecluse probó con éxito los cruces de Calcuta en 1984, pero objetó que eran algo pequeños y no lo suficientemente poderosos para usarlos como los son los gallos reproductores. El tenía sin duda otros gallos mucho más pesados (gallos de velocidad Franco-Belga) para aparearse con sus gallinas.
A la mayoría de los galleros que participan de las luchas en el Norte de Francia les gusta criar gallos que pesan 4,5 a 5,5 Kg. (10 ó 12 lbs.) porque en los reñideros grandes usualmente luchan gallos pesados. Estos son sin duda más eficientes.
Entre los gallos franceses y los belgas que son livianos en cuanto a su peso, uno normalmente encuentra un pequeño número de gallos buenos. Lo mismo se puede decir sobre los gallos demasiado pesados, que a menudo no tienen resistencia y que frecuentemente hieren a las gallinas con los espolones y las uñas durante la cópula.
Importación.
Contrariamente a la mayoría de los galleros locales que no conocían a los orientales, Jean-Louis Bui-van, que pasó una parte de su vida en Vietnam antes de vivir en Francia, tenía una buena opinión porque solía ver gallos Malayoides en los reñideros de Asia cuando era joven. Hizo luchar dos Orientales (primera generación) que seleccioné para que él los usara como gallos reproductores y nunca fueron derrotados.
Ganó cuatro grandes peleas con un "medio Asil", el cual le aconsejé que criara, porque era más rápido que el Shamo y presentaba un estilo de lucha muy bueno. Pero Jean-Louis lo vendió a unos gitanos que insistieron en obtener ese maravilloso gallo.
Jean-Louis estaba sin duda fascinado por el tamaño del cruza de Shamo, mucho más alto que sus parientes (probablemente el efecto del cuzamiento). Usó este último como gallo de reproductores y los hizo pelear dos veces. El resultado: ganó una y perdió otra. Este gallo murió después de la segunda pelea porque estaba malherido debido a un defecto en su estilo de pelea, típica del Shamo: solía empujar su pechuga hacia delante y por lo tanto recibió muchos golpes. Sin embargo, su progenie fue buena, más rápida y retuvo las largas patas de su padre. Uno de los gallos era particularmente bueno: tan rápido como un gallo de riña del Norte de Francia y habiendo heredado las largas patas y la precisión del padre, peleó trece veces en una temporada (12 peleas para grandes premios) sin ser seriamente herido. Jean-Louis lo llamó "Charlot" y lo usó como gallo reproductor. Todos los gallos obtenidos de "Charlot" fueron sobresalientes (así, la tercera generación o gallos con 1/8 Shamo y 7/8 Franco-Belga). Más tarde, contento con los resultados, Jean-Louis sólo se quedó con los cruza de Orientales durante los siguientes años, yendo más allá, con un Asil de la Isla La Reunión que obtuvo de Jacky Payet, un criador francés nacido en La Reunión.
Los descendientes que obtuvo presentaban patas largas y, sin embargo, retuvieron una impresionante velocidad.
Interesado por estos resultados, unos pocos galleros se atrevieron a cambiar sus costumbres, entre ellos, Maurice Hotton, ex presidente de la asociación de galleros en la Velenciennois (región del norte de Francia). Un poco después, Maurice me dijo que estaba arrepentido por haber sido tan asustadizo para usar los Orientales porque sus resultados fueron muy buenos en una cruza de gallo Francés con un muy buen gallo Oriental (tipo Kulang). Yo consegui éstas en 1983 de un viejo gallero de Mal-Tongeren (Limbour, Bélgica del Este). El padre de este gallo fue 13 veces campeón (¡semejante puntuación es muy excepcional en competencias de semi resistencia con espolones de acero gruesas en Bélgica del Este!).
No obstante, el deporte tuvo que esperar en Francia hasta 1990 para ver el verdadero nacimiento de la fiebre de cruzas orientales con el tremendo resultado obtenido por dos galleros asiáticos, Tony Salazar y Kim Sae Han (que emigraron a Bélgica, respectivamente de Filipinas y de Tailandia) haciendo equipo con un gallero experimentado de Belgica del Oeste: Filip Baeckenlandt. Estos galleros asiáticos encontraron problemas con la policia en las luchas clandestinas en Bélgica del Este, donde Kim fue conocido por un largo tiempo. En consecuencia, vinieron a Francia para practicar la riña de gallos sin tener problemas. Por lo tanto, eran experimentados en la cría de gallos de riña Malayoides y en la forma de hacer cruzas con gallos de riña franceses.
Principalmente usaban cruzas de gallos de Taiwan, porque los gallos chinos (como el Asil) golpea más el cuerpo que el Shamo. Uno de los pioneros en lo que se refiere a esa elección de crías fue ciertamente el famoso gallero de Limbourg, Frans Schoubben.
Frans, quien ahora ha dejado de participar de riñas de gallos. Era tan famoso como gallero como lo fue antes como deportista - participaba de carreras ciclistas. Recuerdo cuando lo visité en febrero de 1983, ya estaba preparando muchos gallos Franceses cruzados con Taiwaneses para introducirlos en los reñideros franceses.
Frans era un amigo de René Dehorter de la región de Dunkerke (un puerto francés). Su nombre de gallero es René Dunkerke - él es uno de los administradores de la Federación Francesa de Galleros - y, por lo tanto los intercambios de gallos eran posibles para hacer cruzas de Orientales y venir en ocasiones a Francia para probarlos en peleas de velocidad con espolones de hierro delgados y derechos (52 mm de longitud).
Más Orientales.
Hoy en día, más y más Orientales son vistos en los reñideros franceses mientras más y más galleros de Bélgica del Este vienen a Francia para las riñas de gallos, algunos para peleas de velocidad, otros para las competencias clásicas de semi resistencia belgas con espuelas delgadas de acero. Desde julio de 1993 se está aplicando una nueva ley, sin duda más dura para los espectadores de las riñas de gallos. Por lo tanto, más y más galleros de Bélgica de Oeste y Norte de Francia tienen la oportunidad de encontrarse con los criadores de gallos de riña Orientales de Bélgica del Este.
Ahora el problema es el número de batallas de gallos (de cruza Oriental) usados como reproductores en Bélgica del Oeste y Norte de Francia. Muchos galleros tradicionales se preocupan de la posibilidad de la extinción de las razas locales de gallos de velocidad (es decir: el Gallo del Norte de Francia, el Gallo Flamenco y la tradición entre ambas: al que podríamos llamar "el Gallo Franco-Belga", porque durante décadas el Gallo Francés ha sido cruzado con el Gallo Belga Flandes).
Sin embargo, muchos buenos galleros aún conservan gallos de riña locales y espero que conserven esas razas típicas a lo largo de los años para evitar encontrarnos con el mismo problema de Bélgica del Este en los años '70: la extinción progresiva de una cría local. El magnífico Gallo Liege ha sido destruido sin lugar a dudas a través de las cruzas con los Orientales, como a los galleros no les preocupaba conservar especímenes puros de crías en cantidad suficientes. Muchos buenos galleros se lamentan por ellos, porque las cruzas con Shamo dan las mejores aves para riñas de semi resistencia en la primera generación.
La Cruza es interesante, pero por otra parte ¡es necesario conservar crías de razas puras ...!

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